domingo, 15 de noviembre de 2009

¿El cuarto poder?

Interesante texto, muy distinto a los anteriores.


LA PRENSA: EL CUARTO PODER


En clase se dijo que la prensa es el cuarto poder; yo opino que va antes, que su importancia es mayor, y voy a tratar de demostrarlo

Mi medio de comunicacion preferido es la radio, en especial para informarme y recabar opiniones diversas que con mucha frecuencia coinciden con lo que yo ya he pensado, sobre acontecimientos puntuales. Eso me hace pensar que no soy tan tonta o inútil como creía.

Y, al mismo tiempo, me asusta porque no sé hasta que punto juegan con mi cabeza y con la de los demás, que a nivel de casa puede pasar, pero ¿y si es lo mismo a nivel nacional, o incluso internacionalmente? Y, lo que es peor, se aferrarán quienes deciden qué hay que saber y comunicar a una sola idea y la llevarán a cabo caiga quien caiga? La pregunta es obvia: ¿quién mueve esoshilos?, ¿Los partidos?, ¿Los estados? Yo estoy segura de que alguien más fuerte que todos ellos juntos y que, sin que nos demos cuenta, cambia hasta los Gobiernos cuando le conviene, cuando piensa que unos ya han llegado demasiado lejos y les toca a los otros, estén o no preparados (que mas da), con bigote, con cara de bobo o de bamby: ya se las arreglarán ellos con los medios a su favor para mover los hilos.

Eso se lo manifiestan los mismos oyentes, lectores o televidentes. Escuchas una opinión y dice "Muchas gracias, Sr. Gabilondo, es usted la razón de mi vida". Cada día, cuando les escucho por las mañanas, escucho a gente que afirma poner el despertador a las seis de la mañana para seguirlos. Otro grupo de personas dicen que, como su emisora nueva no se coge en todas partes, nos hemos reunido un grupo de señoras mayores y nos hemos comprado un ordenador, pues así podemos escuchar mejor el programa en cuestión (y han tenido que aprender a manejar al menos el raton). Esto es sólo una pequeña prueba "de andar por casa" para explicar y dejar claro hasta donde influye la prensa en las personas.

Os habéis dado cuenta de que hasta la emisión de las películas está completamente dirigida y orquestada, según el momento y las circunstancias (y no me refiero a las que emiten en Navidad o Semana Santa, que siempre son las mismas y repetidas, sino a las de un día cualquiera). De los temas de cotilleo no puedo opinar porque no los veo, pero por lo que escucho en la calle, en la peluquería o en la misma radio cuando también hablan de ellos, es más de lo mismo.

Mi conclusión es que, si a nivel de gente de la calle son capaces de influir, si lo trasladamos a las altas esferas la situación sería igual o peor porque no nocesariamente la gente que está arriba es la más inteligente, pero sí la más rastrera. ¡QUE DIOS REPARTA SUERTE!

No hay comentarios:

Publicar un comentario